By the Colombian author of The Bitch, a 2020 National Book Award Finalist and PEN Awards Winner
Claudia is an impressionable eight-year-old girl, trying to understand the world through the eyes of the adults around her. But her hardworking father hardly speaks a word, while her unhappy mother spends her days reading celebrity lifestyle magazines, tending to her enormous collection of plants, and filling Claudia’s head with stories about women who end their lives in tragic ways. Then an interloper arrives, disturbing the delicate balance of family life, and Claudia’s world starts falling apart. In this strikingly vivid portrait of Cali, Colombia, Claudia’s acute observations remind us that children are capable of discerning extremely complex realities even if they cannot fully understand them. In Abyss, Quintana leads us brilliantly into the lonely heart of the child we have all once been, driven by fear of abandonment.
Pilar Quintana is a Colombian writer. She was born in Cali and studied at the Javeriana University in Bogota. She is best known for her novels La Perra, which won the IV Award Biblioteca de Narrativa Colombiana, and Coleccionistas de polvos raros, which won the La Mar de Letras Award.
Me ilusioné con la idea de que este libro, por haber ganado el Premio Alfaguara de Novela, iba a ser magnífico y de lo mejor que he leído de Pilar Quintana, pero no fue así. La parafernalia de la preventa del libro casi un mes antes para que llegara firmado por la autora, con el separador personalizado con la ilustración de la portada y la carta anecdótica del libro que escribió Quintana, que viene como anexo, prometían mucho más de lo que en realidad es la historia que leí. Luego vi que el jurado del Premio está presidido por Héctor Abad Faciolince y pues, bueno, qué se puede esperar.
Salvo contados fragmentos y algunas alusiones a la naturaleza y los abismos (tanto literales como figurados), la narración se queda corta en cuanto a aquello que promete tratar: el temor de la orfandad u otros temores de la infancia. Las alusiones a estos temas no se profundizan tanto como lo permitirían los abismos, precipicios o barrancos de los que trata. Es una historia bien escrita y con una agudeza interesante en algunos pensamientos de los personajes. Pero nada más. Ahí se queda.
Los abismos se lee, como se dice, en una sentada. Es una historia compacta y fluida, en la que no decae la atención nunca y que deja la sensación de haber caminado al lado del personaje principal al filo de un abismo, sin estar seguros de si se iba a caer o a salvarse. Igual que en La perra, la novela anterior de Pilar Quintana, la naturaleza es casi un personaje de la novela, los abismos a los que se refiere el título aparecen en el relato tanto de forma geográfica como psicológica, con el significado real y emocional que implican. Las matas de la madre en el apartamento de la familia, la carretera, e incluso el entorno urbano también aparecen con una carga semántica significativa. Aunque la narradora ya no es una niña en el momento en el que relata los hechos de su infancia a los que se refiere el relato, la voz sí logra conservar de esa etapa de su vida la perspicacia, el asombro y cierto nivel de inocencia para procesar su entorno y las acciones de los adultos que la rodean. Es inevitable, tras leer la carta de la autora que acompaña esta publicación premiada, no quedar atenta a la secuencia de la historia de Claudia, la protagonista; despierta mucha curiosidad saber cómo la afectaron ya adulta estas vivencias de su infancia, con sus muertos, sus reflexiones y las diversas dificultades de salud y emocionales de su familia.
Pilar Quintana’s brief novel won the renowned Alfaguara Award in 2021. It’s set in the Columbian city of Cali during the early 1980s, a place now notorious for its links to the Cali Cartel. At this point in its history, it was already known for drug-related violence. But Quintana’s narrative only provides glimpses of the city’s turmoil. Instead, her focus is on a middle-class family in crisis, although the suppressed violence of their situation often seems to mirror broader forms of violence in their society, particularly when it comes to women’s experiences.
The story’s told from the perspective of the family’s eight-year-old daughter Claudia, although numerous shifts in register suggest Claudia’s looking back at her past rather than recounting events as they occur. After her mother’s ill-fated affair, Claudia becomes a key witness to the slow breakdown of her parents� marriage. A fracture that marks the beginning of her mother’s physical and mental disintegration. Quintana concentrates on Claudia’s feelings, her confusion, as she tries to interpret the adult world surrounding her. She also shares her mother’s name and, it’s hinted may eventually face the same predicaments.
Although there’s an abundance of striking imagery and some marvellous descriptive passages, especially those featuring Cali’s landscapes and nearby mountains, I found this quite an uneven, sometimes frustrating, piece. At times it reads more like an extended character sketch of a mother and daughter despite various gestures towards gothic mystery - primarily represented through a storyline that echoes aspects of Du Maurier’s Rebecca. There are awkward stretches of mundane dialogue, and although Quintana’s exploration of patriarchy and destructive gender roles has potential, I didn’t feel it lived up to its promise. Translated by Lisa Dillman.
Thanks to Netgalley and publisher World Editions for an ARC
3,5* Depois de ter lido A Cadela e de ter gostado muito, as minhas expectativas estavam demasiado elevadas. Houve alturas em que a escrita me parecia algures entre Daphne du Maurier e Shirley Jackson, o que, para mim, é um elogio. Até mais de metade, o livro conseguiu prender a minha atenção com sucesso. Mas aguardava uma reviravolta que não chegou a acontecer e, por isso, não posso negar alguma desilusão e confusão. A relação entre as Cláudias desta história tinha pano para mangas. É verdadeiramente impressionante o estrago que as mães podem produzir quando são infelizes. Como é fácil resvalar do desamor e da inércia para a desistência e para atração pelo precipício e pela queda! Mais do que a genética, será o exemplo a impelir estas mulheres para os vários abismos figurados da existência humana. Mesmo quando não existe morte, não significa que o abismo já não tenha consumido a pessoa inteira.
Debo reconocer que este libro me capturo fácilmente, me sentí muy identificado en esos miedos que sentía Claudia, esos miedos de infancia que todos en algún momento de nuestra vida temprana sentimos(El miedo de perder a nuestros padres). Me pareció un relato muy fluido, hace que uno se sienta en una montaña rusa de emociones por los contrastes fuertes que pueden llegar a existir en una familia disfuncional y sobre todo cuando uno de sus miembros sufre de depresión y ninguno es capaz de reconocer. Lo recomendaría sin pensarlo mucho. Quizá por lo único que no le doy 5 estrellas es por el final de la historia, quede con ganas de más.
La infancia no te exenta de enfrentarte a los abismos más profundos y oscuros, la infancia tampoco es una burbuja en la que no entra el conflicto, la frustración y el miedo. Los niños, sobre todo los que son como Claudia, se dan cuenta de todo, lo sienten todo y lo procesan (a como pueden) todo.
Siempre lo he pensado y otras más lo he vivido, sin querer los hijos terminamos asumiendo o cargando siempre con las decisiones que toman nuestros padres, con comportamientos, con silencios, CON ABISMOS, y es a partir de ellos que trazamos nuestras vidas, que decidimos cambiarlos o repetirlos, que nos lanzan a ser igual o completamente diferentes.
Los abismos es una historia de decisiones, asumidas por Claudia, una niña que desde su inocencia intenta comprender la relación de sus padres, no solamente entre ellos, sino con ella misma y una serie de sucesos que abren la puerta a lo que serían sus más grandes temores.
Pd: Leer el premio Alfaguara se ha convertido en un ritual de todos los años ♥️ y este afortunadamente, no fue la excepción. Qué Alegría que haya sido Pilar la autora de este libro y que admiración tan grande la que siento por ella cada vez más.
Me enganchó y es fácil y ligero de leer, peeeero, esperaba más, mucho más. No demérito el trabajo de Pilar, tiene una pluma exquisita, pero la historia me quedó a deber. Esperaba una verdadera bomba de emociones y un puñetazo radical en el cerebro. Tenía la esperanza de doblar las esquinas de cada hoja... Sólo doblé una.
La autora Colombiana Pilar Quintana nos mete de lleno en la piel de Claudia, una niña de 8 años de clase media que vive en Cali con sus padres. Esta es una historia de una familia, o al menos de la versión que Claudia nos cuenta, repasando un episodio muy particular de su vida, incluyendo también pinceladas de las historias anteriores de su madre y su padre para ponernos en contexto con su pasado. Sin embargo, Los abismos va mucho más allá de una simple historia de una familia, pues entreteje temas tan complejos como la muerte, el suicidio, la ausencia, la soledad, y el vacío.
La novela se divide en cuatro partes, cada una de ellas pertinente a un momento determinante en la infancia de Claudia, comenzando con una especie de contextualización, a manera de introducción a la historia de esta familia, usando recursos como las fotografías para ir identificando a los personajes. Se podría decir que cada una de estas partes representa un abismo en sí mismo, una fisura en la estructura de la familia de Claudia. Se crea así la atmósfera adecuada para que nosotros, como lectores y espectadores de esta íntima historia, tengamos las herramientas necesarias para identificar los abismos físicos y metafóricos que se nos van presentando cuando Claudia, su madre y su padre van a pasar las vacaciones de mitad de año a una finca de una familia amiga a las afueras de Cali. Nosotros mismos tendremos que ir desentrañado el gran abismo que se va abriendo de forma muy sutil e interesante en la vida de la madre de madre Claudia, también llamada Claudia.
A medida que avanza la narración, inevitablemente nos pondremos a pensar en esos vacíos incómodos y a veces invisibles que se crean en las familias, esas fisuras o grietas que rompen y trastocan las relaciones con nuestros seres queridos. La autora retoma ciertas temáticas habituales en sus libros que determinan estas fisuras, como la maternidad, la naturaleza, y la cultura popular.
Nos cuenta historias que las mujeres normalmente callan y busca reivindicar la necesidad de contarlas. Describe con detalle la casa de Claudia, que para ella era una selva, con la magia propia de los niños. Cuenta todo lo que sucedía en ella, las escenas íntimas de su familia y de la violencia latente en la región. Cuenta la relación con su madre y, a su vez, lo que ella le había contado de su abuela.
Vamos conociendo, siempre de la mano de Claudia, sus rutinas, su entorno familiar, la historia de sus abuelos, cómo se conocieron sus padres. Conocemos también a su familia cercana: Amalia, una tía por parte de su padre, que también es propietaria del supermercado donde éste trabaja. Y Paulina, una muñeca de tamaño casi real que acompaña a Claudia en sus diversas travesías, tanto exteriores como internas.
Claudia llega para sumarse a ese creciente grupo de niñas narradoras en las obras literarias. Su voz le aporta a "Los Abismos" la inocencia necesaria para contar lo que ve sin filtros ni valoraciones. Es una voz descriptiva, que no hace juicios o digresiones. La narración avanza a partir de las acciones y los diálogos. Una familia normal significa una familia disfuncional, como lo son todas, cada una a su manera.
Además del núcleo familiar, se pasean por esta novela una galería de personajes que, como las fotos que analiza Claudia, sirven para retratar un contexto en el que el patriarcado asfixia no solo a las mujeres sino también a los mismos hombres. A ellas les niega la posibilidad de una vida distinta al matrimonio, la maternidad y el hogar. Por ejemplo, cuando la madre dice que quiere trabajar el esposo responde que no entiende para qué. Y a ellos los reduce al rol de proveedores económicos, con nulas posibilidades para la expresión de afectos y miedos.
"Los Abismos" es también una novela sobre Cali, sus calles, su clima, su río, sus barrios y su lenguaje. Los diálogos se leen con acento valluno y el paseo del padre y la hija por el zoológico lleno de grandes animales enjaulados, como lo son la madre y el padre, es una caminata en la que los lectores sentimos el calor y la brisa, además de la tensión. Estas fieras encarceladas se complementan con la selva que crece en el apartamento de la familia: una vegetación verde, espesa y enmarañada, como la mente de Claudia.
“Los Abismos� puede leerse como la contraparte de la novela anterior de Pilar Quintana, “La Perra�: mientras “La Perra� nos cuenta la historia de una mujer que quiere ser madre y no puede, “Los Abismos� se ocupa de mujeres que son madres pero que hubieran preferido no serlo. Depresión, soledad, violencia simbólica, suicidio, deseo femenino, códigos sociales y enfermedad mental son algunos de los temas que aparecen en esta obra, que en algunos pasajes tiene visos de suspenso y tensión. La posibilidad de la muerte súbita aparece en cada página de la novela. Para morir sólo hace falta caer por un abismo. Lanzarse es una opción.
“Los Abismos� se enfoca en la muerte y en esas situaciones que conllevan a algunas mujeres a fugarse, a desparecerse o a simplemente quererse morir. Los ejemplos de mujeres famosas y de otras no tan famosas pero sí más cercanas, van preparando a Claudia para enfrentarse a la muerte y a los deseos suicidas de las personas.
También resalta mucho el tema de la maternidad y la paternidad: ¿qué golpea más, la ausencia del padre o la depresión de la madre? Pilar Quintana logra ponernos a pensar en los miedos que tenemos de niños, en la muerte de nuestros padres, en la pérdida de un ser amado, en la separación de la familia, nos instala en un abismo del cual cuesta volver a salir.
Y tal cual como un abismo, nos presenta un final abierto, en el que la caída nos deja hechos trizas. Una tristeza abismal, como un agujero negro sin salida, un salto al vacío, en el que tanto nosotros como los personajes terminamos quebrados, fisurados.
Reseña completa sin spoilers en mi canal de YouTube � Maponto Lee 📚
Suddenly I was at the mountain house. It was nighttime. I was standing at the hall mirror and my reflection showed me, small and dark, in a white nightie, Paulina in my arms. We had the same French braids as the girls and our heads hurt. Fog passed before us, then enveloped us, and when it dissolved, we were on the edge of the cliff. The abyss was calling, tugging at us. I offered up Paulina, in an attempt to appease it, and though the abyss devoured her she wasn’t enough; it wanted me too. Claudia, it called. Claudiaaa, howling like the wind when it tunneled through the canyon. I fought with all my might, trying to sever the thread at the bottom of the abyss, the thread that was pulling me down through the dry leaves that were my dead.
Abyss is Lisa Dillman's translation of Pilar Quintana's Los abismos which won the Premio Alfaguara de Novela in 2021, and follows the by the same duo, a National Book Award Finalist for Translated Literature.
The story is narrated by a eight-year old girl (*), Claudia, who lives in Cali in Colombia with her middle-class family. Claudia's father owns and runs a supermarket, and her mother, who is much younger than her husband, is a housewife her plans to go to University to read law blocked by her father, and she now lives on a diet of celebity magazines.
Things take a turn for the worse when Claudia's paternal aunt marries a man much younger than her, and then he and Claudia's mother have, or at least are suspected by their partners to have had, an affair. The brother-in-law vanishes from the scene (Claudia suspects her father may have threatened him or worse) and Claudia's mother settles into depression, her new literary love the story of starlets who died young and in mysterious circumstances (which, unlike the conspiracy theorists, she assumes is suicide in each case):
“Papá, are there people who don’t want to live?� It was Sunday and Cali was deserted. All for us. “People who don’t want to live?� “Mamá said.� “She told you there were people who didn’t want to live?� “Like Karen Carpenter, she killed herself by starvation.� We were standing at the mouth of the Aguacatal River. “Your mother told you that?� Ԩ.� “The Carpenter woman had a disease.� The waters of the Cal flowed gently between the rocks. “Well Princess Grace of Monaco drove off a cliff.� “That was an accident.� “How do you know?� “They said it on the news.� “What about Natalie Wood?� “Also an accident.� “They said it on the news?� Ԩ.�
The abyss of the title is one by a house in the mountains, owned by an old friend, where the family go to try to piece back their lives, although Claudia's father spends much of his time travelling back to sort things out at the supermarket, her mother drinks, and Claudia herself becomes obsessed with the story of the previous owner of the house, a woman who following a row at a party drove off into the foggy mountainuous roads and was never seen again. And the fourth member of the family, Claudia's beloved doll Paulina, develops suicidal thoughts of her own.
I have to admit this one didn't work for me. The narrative voice I felt was unsuccessful - Claudia seems to be narrating the story from the perspective of her 8-year old self (there is no sense of 'I later discovered' / 'I realise now') but in a voice that is clearly of someone much older. And the story is both rather straightforward and, like The Bitch, highly intense, but less successfully than the earlier novel, with the intensity tipping into overwrought.
Por la atmósfera, por los diálogos, por los silencios y por la tensión constante, sentí que bordeaba un abismo mientras leía este libro, con ese susto ante una tragedia inminente. Pilar Quintana recrea cómo se da el estrago materno en Claudia, una niña que busca el amor de, ojo, Claudia, su mamá, pero en vez de amor pleno se encuentra con un mundo tétrico que la sitúa en la periferia. También es una historia sobre cómo ser hijos nos condiciona para ser padres. Los personajes están muy bien construidos: los que deben ser redondos son redondos y lo mismo con los planos, que tienen una función clara en la evolución de los primeros. Los personajes principales se caracterizan a partir de su historia familiar e infancia; los secundarios se delinean muy bien con pocas indicaciones, como es el caso de Gonzalo y su relación con los deseos de la tía Amelia y de Claudia mamá. Los abismos está escrito con un estilo suave y profundo. Se ha criticado que el inicio carece de fuerza. Es cierto que es suave: la descripción del apartamento de Claudia no insinúa el conflicto narrativo ni contiene frases o acciones punzantes. Pero suave no significa débil. Por el contrario, la imagen de selva en esta descripción sirve muy bien a la historia y será la que yo evoque cuando piense en la zozobra de las Claudias y en el libro. El libro tiene unas metáforas preciosas y unos juegos de espejo que refuerzan esa idea de que se ama como se aprendió a amar en la infancia. Con seguridad volveré a algunos fragmentos de gran fuerza poética.
When you are a child, you see the world much differently than adults. You ask questions but sometimes the adults don’t want you to know the answers of adult things. Especially when it concerns your parents.
Claudia lives with her parents in Cali, Colombia. Her dad runs a supermarket while her mom is a stay at home mom. Her mom loves her plants and the apartment is more like a jungle than a tidy home. Mom does like to look at magazines, which her daughter is fascinated with, and at times, not sure what those stories really are about. Although no dates are given, judging by the references to Bo Derek, Princess Diana and Farrah Fawcett Majors, we are in the 1980s.
Life is kind of boring for her mom. One day, Claudia’s aunt Amelia returns home, married to a hot young man, Gonzalo. Her parents have a big age gap: she is 28, he is 42. Nothing like a little attention for the wife whose husband works works works. We know what kind of tension this causes in a marriage? Not to mention the aunt.
Trapped in her marriage, fuelled by alcohol and gossip magazines, the mom tells Claudia stories of women who died tragically: Nathalie Wood, Princess Grace, and Karen Carpenter. Then one day her good friend Gloria Inés died and her mom goes into a tailspin. Filling the girl’s head with this stuff really pushes her down a dark path. Fortunately Claudia has a doll, Paulina, who helps along the way.
Her dad realizes that a holiday is needed and they take refuge in a farm, high up in the valley 40 minutes away from Cali. The retreat works at first but then word is out about the tragic history of the place, and then fueled by “el viruñas,� a regional Colombian devil figure, things go off the rails and staring into the abyss.
In any other book this would be a dark story of depression and alcohol abuse. Being told from the child’s point of view, it drives down a dark place, complete with all its challenges but it somehow weaves in and out of the darkness. The ending is, well let’s just say very Latin American!
Winner of the Premio Alfaguara de novela 2021. Héctor Abad Faciolince presided over the jury, which included Irene Vallejo. Not surprising but a very fine book. I definitely want to read more by Pilar Quintana.
¡Ni tiempo me dio de venir a poner aquí que lo estaba empezando a leer porque me tardé un día en hacerlo!
Es un libro sumamente ligero, divertido en partes, trágico en otras, adorable la mayor parte. Porque toda la vida la vez a través de Claudia, una niña de 8 años que es hija única y su compañía es su mamá y su papá y la tía. A lo que Claudia está expuesta a puras pláticas de adultos, desde un día en la oficina hasta escuchar las tragedias ajenas de los amigos, las penas y agobios propios de sus papás. Claudia, así como todos, a los 8 años la vida te parece inmensa y cada día descubres algo que no sabías pero que tampoco te explican así que lo interpretas a tu infantil manera.
Claudia pasa a interpretar la vida de acuerdo a lo que viven en su familia, toma las tragedias como algo que pueden suceder diario hasta que ella comprueba lo contrario. La niña descubre la depresión a través de su mamá, el enojo y la frustración a través de su papá, el amor a través de su tía, el miedo a través de Rebeca, la mujer que un día desapareció en un barranco y nunca regresó.
De esta manera, la historia es un periodo de vida de Claudia y su familia donde, como cualquier otra familia pasan de todo lo bueno, a lo menos bueno, a lo horrible, a lo peor. Amé el giro que la autora le dio cuando Paulina, la muñeca de la niña entra como otro personaje incidental pero fundamental dentro de la historia.
No es un libro profundo y desgarrador y triste, es un libro bellísimo del asombro y descubrimiento de la vida adulta, de esos momentos claves en tu niñez que van moldeando tus pensamientos, que siembran terrores que viven los demás y los tomas como tuyos, de ese susto en la panza que te provoca que un día tu familia viva la misma tragedia que escuchas que les pasó a los otros y del alivio que te da saber que hoy también llegó papá y no se fue por un barranco.
Me quedo de nuevo maravillada con la manera de transmitir sentimientos de Pilar Quintana. La narración impecable en primera persona de la adulta Claudia, nos acerca a la niña Claudia de 8 años, a sus reflexiones y miedos infantiles con los que yo me he identificado, no hay que darle más vuelta, ni buscar más significado, muestra el miedo a la soledad, a la perdida, a la muerte, a la separación, búsqueda de la aprobación materna. No tienen que ocurrir grandes desgracias en una novela para que cuente mucho. Agradezco a Pilar Quintana que conserve en su narración su acento y su tono de voz que te lleva a esa selva, y te hace sentir el abismo y la niebla.
Pilar Quintana's ABYSS reminds me very much of WHAT MAISIE KNEW by William James. A wise observant child sees much more than the adults around her assume she is capable of seeing, and by naively reporting her observations here in the novel, the child indicts the adults in her life, both for their shallowness and aimlessness, as well as for their casual cruelties.
James's novel is written in third person and I think his choice of perspective works better for me, for a story where a naive-wise child is the witness to adult foibles. Williams's choice to make Maisie a character inside of his story allows us, as readers, to float somewhere at a distance, and to see his characters whole, including the child at its center--and to have pity for them. Whereas Quintana's first-person narrator, Claudia, feels a little too wise to me sometimes, and a little too self-absorbed, where the story becomes more about her than about what she observes.
So I'm ending up writing a very technical-crafty review of this novel. The mode of how this story was told was what interested me most about it. The happenings in and of themselves felt a little small, and mean, and I could find no greater theme to grab onto, where I could feel pity, or could care much at all for these feckless adults and their various peccadillos.
It's a very tricky thing to pull off a story where a child's perspective dominates, and where we readers are meant to see past the child's limited perspectives, and to see the whole of it. It didn't quite work for me here. I wanted some greater meaning and it didn't happen.
"Todos mis muertos, pensé. Si los de mi papá estaban en sus silencios y los de mi mamá eran las plantas de la selva, los míos eran las hojas a punto de caerse."
Hay algo profundamente sensible en esta novela, algo que no logro explicar por completo, pues la pluma de Pilar Quintana crea mundos enteros, emociones precisas y realidades complejas a través de una "simple" historia de infancia. Es una novela que explora de forma muy autentica lo que significa crecer y entender el mundo y sus movimientos, y por eso me gustó mucho más que "La Perra".
A través de aquella mirada inocente e infantil de Claudia, la novela logra de forma maravillosa dar pequeños indicios de esos temas tan profundos que se esconden a los ojos de los niños. Así, en las hojas de esta selva de libro, se tratan temas duros, reales y llenos de vida; la feminidad, la alienación del mundo moderno, la maternidad, la depresión, la muerte, todo bajo un velo de inocencia que impregna a la historia de cierto encanto de sueños y pesadillas. Es un libro que vale la pena volver a leer, pues esconde fantasmas y vidas entre sus páginas, atisbos de mujeres abandonadas, de vidas perdidas en lo profundo de los abismos.
This is like a Columbian version of or , albeit Bowen's narrator is an adolescent, not a child as in Henry James and Abyss. In this book we have a child's-eye view of the complicated lives of adults encompassing sex, adultery, depression told to us via a narrator who understands the emotional significance of what is happening but doesn't comprehend either adult behaviour or the full implications of what she is witnessing.
There are some powerful pieces that illuminate how children are deeply affected by their familial surroundings but overall I didn't find this as impactful as I'd hoped. The Columbian setting is fascinating and gives the book a shot of energy. However, I seem to have read a lot of books recently turning on the claustrophobia of standard gender roles, especially the plight of intelligent women who are not allowed to work outside the home, and the resultant repression and frustrations of patriarchal control that take a toll on mental health - always an important topic, just overdone in my recent reading choices - mea culpa! Anyone coming to this topic afresh may well respond more positively to Quintana's work.
Many thanks to World Editions for an ARC via NetGalley.
Bir Cabrol, bir Godard, bir Teyzem. Savruldum da ha durdum. Cali’ye de gitsen, Beylerbeyi’ne de, Paris’e de fark etmiyor. Hiç yabancısı olmadığımız bir hikaye. Ama bir o kadar da "bu hiç mühim değil bir özellik". Özellikle Yeni Dalga filmlerine yakınsayan dokunaklı ve güçlü bir atmosferi var. Ve Pilaraanım şahane bir yazar. İkide iki. 80ler, Playboylar, Renault 12ler, bir canlının sorumluğunu üzerine almaklar, Hola! kapakları, Natalie Wood, Grace Kelly ve Karen Carpenterlar, ölümler, uçurumlar, guayacan ve envai çeşit süs bitkileri, çocuk olmaklar, bunalımlar, çıkmazlar ve en mühimi mecburiyetlerden yorulmuşluklar�
Ganadora del Premio Alfaguara de Novela 2021 en Los Abismos la genial escritora Pilar Quintana nos habla de una niña, Claudia, y su niñez en la Cali de los años setentas-ochentas, a través de sus ojos vemos cómo su hogar de desmorona y cómo los abismos tanto los metafóricos como reales van creciendo hasta absorberlo todo.
Completamente engachado con la narrativa de Pilar. Es cruda, directa pero a la vez con un toque de ternura incomensurable. Con Claudia podemos no solamente ver la historia de una niñez sino de una sociedad machista e intolerante y como plus todos los que crecimos en Cali podemos vernos reflejados en muchas cosas que ella hace y lugares a los que va. Recomendada.
Nadie más autorizada para hablar de la depresión de una madre, que su hija de 8 años. En la infancia narrada por Claudia estamos todas quienes crecimos en los ochenta en Latinoamérica: una frondosa y verde que escondía la violencia y micromachismos de una época insondable. Llena de metáforas, es una obra inteligente y prometedora, aunque incurramos en el error de leer “La Perra� otra vez.
Me gustó mucho. Es una novela corta (160 páginas aproximadamente), ambientada en Cali y otros lugares de Colombia.
Narrada desde la voz de Claudia, una niña de 8 años, la historia se centra en sus padres y la dinámica de su matrimonio. También la relación con otros familiares y entorno.
Hay una ambientación excelente de la década de los ochenta a través de las revistas que lee la madre. Y unas descripciones que te sumergen en el lugar, ya sea el departamento de la familia o una hacienda en la montaña.
Los abismos del título son reales y físicos: el hueco de una escalera, un barranco en las montañas, el vacío desde el balcón de un piso alto. Pero también son metaforicos: la distancia entre los deseos y la realidad, la separacion de las personas a raiz de los silencios y secretos, la frustración, la depresión, las expectativas incumplidas, etc. Amé la forma en la que la autora describe la sensación de vértigo en la niña.
Es una historia de mujeres en distintas épocas. Mujeres que se conforman, que no pueden elegir. Mujeres cuyo único valor es en relación al matrimonio y que cuando se salen del camino trazado son arrastradas nuevamente a esa vida que no eligueron o simplemente dejan decestar. También es una historia de la maternidad. Una maternidad de alguna manera impuesta, "esperada" por el entorno.
Lo leí de un tirón. La forma de narrar de Pilar Quintana te va llevando.
Quizá mi unico "pero" sea la voz narradora, que por momentos se vuelve extremadamente adulta para la niña de 8 años.
(4.7) El primer libro que leo de Pilar y me encantó. Hay tantas cosas que hablar del libro, así que empecemos.
La historia está contada por una niña de unos ocho años llamada Claudia, que nos va a ir narrando su vida y la forma en cómo la relación de sus padres se fue deteriorando y cómo los abismos que se forman entre ellos impiden que sean una familia feliz.
Claudia nos cuenta de su mamá, y de su vida, de cómo terminó casándose con un hombre mayor que ella y los problemas que tuvo que afrontar. Por otro lado, vemos la vida del padre, desde que era pequeño y su trabajo actual, que era prácticamente su vida entera y a la cual se dedicaba con bastante fervor. Sin embargo todo cambia cuando la hermana del papá de Claudia consigue nuevo esposo y todo se comienza a desmoronar.
Además en este libro vemos diferentes lugares de Cali (sin ser tan detallados), la cultura y la forma de hablar, lo cual me fascinó bastante porque ese hablado lo seguimos haciendo hoy en día.
Hay muchos factores que afectan tanto la relación de los padres como cada uno de manera individual y vemos también el tema de los abismos, tanto de una forma literal como metafórica. Donde el silencio del padre y la depresión de la madre hace que se separen sin que puedan evitarlo.
Otro punto que me gustó bastante del libro, fue la forma en que explicaba la visita a una finca que tiene gran importancia en la trama, tanto por lo qué pasó tiempo atrás como lo que viven ellos cuando deciden quedarse de vacaciones un tiempo. Ya que hay un relato que pasó que deja a la niña bastante intrigada y teme que su mamá termine igual.
Lo que me gustó: * Una historia que se lee muy rápido, que engancha. * El tema de los abismos que va mucho más allá de un precipicio. * La inocencia y cómo juega Claudia (niña) con eso. * El acento caleño y todo lo que tenga que ver con Cali. Me sentí recorriendo la ciudad de nuevo. * Los demás personajes que aportaban a la trama.
Lo que no me gustó: * A veces los diálogos no eran muy naturales. * Para mí, faltó explorar un poco más de Cali, otros sitios de la ciudad.
En conclusión, es un libro muy bueno, que atrapa desde el inicio y que se lee muy rápido. Nos hace recordar a la ciudad de Cali en sus años pasados y que nos mostrara que los abismos son tan reales como nosotros.
Los griegos llamaban «alétheia» a la verdad, pero su definición exacta es «aquello no oculto». Es interesante que se defina de esa forma, porque nos está diciendo que se muestra algo que está medianamente escondido. Es una definición veleidosa, ambivalente, misteriosa, mitad luminosa mitad oscura. No se dice «aquello que se ve» sino «aquello que no está escondido», que nos es evidente dentro de otras cosas que no podemos ver.
Algo así ocurre con la escritura de Pilar Quintana. En «Los abismos» creemos que por ser la voz de una niña hay algo de inocencia, de candidez, y sin embargo estamos siempre en el borde, siempre develando lo que podría ser y lo que no, creyendo desentramar lo que la historia verdaderamente contiene en medio de esos claroscuros tan bien trabajados.
Estuve pendiente de la llegada de “Los abismos� a Chile apenas supe que había ganado el Premio Alfaguara de Novela 2021. Hacía poco había leído “La perra� y quedé muy entusiasmado con la habilidad de Pilar Quintana para coquetear con lo no dicho, con esa forma tan «border» de mostrar y esconder al mismo tiempo. Una habilidad que aquí se repite de forma deliciosa.
La vida familiar a través de la mirada de una niña. Problemas conyugales, con las lógicas consecuencias en sus ánimos. La frustración y depresión materna, el enojo y dedicación al trabajo de su padre, el clima hogareño sumamente enrarecido. La sensación de abandono, el descuido, el miedo, la indiferencia, la autoestima dañada, la espera de lo peor. ¿Qué me pasó al leerlo? No pude captar ese tono propio de la mirada infantil que se menciona en la sinopsis. Sin duda, la limitación es personal, esa niña me llegaba demasiado adulta, madura y suspicaz para sus 8 años. Sumado esto a una descripción que me resultó monótona, generosa en acontecimientos que no me despertaron interés, los abismos de peligro, temores y muerte que ella percibe fueron, para mí, profundos pozos de aburrimiento. Termino esta lectura pensando que por más bien escrito y premiado que sea un libro, no siempre se produce la magia. No es novedad, sólo pasa...o no 😒
My thanks to World Editions for a review copy of this book via NetGalley
Abyss is a story of family, of marriage, adultery, estrangement and depression all told through the eyes of an eight-year-old child (like a ŷ friend and fellow reviewer, I too was thing of What Masie Knew). Written in Spanish by Columbian author Pilar Quintana, the book is translated by Lisa Dillman. Claudia is an eight-year-old girl living with her parents, her namesake mother married to her much older father who runs a supermarket. There is also an older aunt, single and living close by whom the family visit often. Claudia’s father is a reserved man, absorbed in his work and rarely speaking much; her mother on the other hand is still young and pretty, usually staying engaged in reading magazines and interested in the lives of celebrities and movie stars, especially those whose deaths have been mysterious or involved suicide, and in her plants which have overtaken the house so much so that Claudia describes it as a jungle. Different though it is, their lives are carrying on like this, peacefully enough when her mother’s short-lived affair changes things, bringing an estrangement between her parents and sending her mother deep into depression. Other events take place which shake her out of it, and start to bring things to some semblance of normalcy but her mother’s depression never really goes away. Amidst all this Claudia increasingly fears for her parents and by extension herself, always plagued by the fear that she might lose them.
Abyss gives us a rather complex set of characters; Claudia’s father, with a dysfunctional and neglected childhood, the burdens of which he still likely carries; he is running his supermarket successfully and falls in love with and marries a much younger woman. His anger at the affair and the resulting estrangement are not surprising, yet this event also triggers insecurities. He loves little Claudia and we see him taking her out for walks and to the zoo, but his nature means they don’t really communicate or connect. Claudia’s mother likewise comes with the scars of her past, having her wishes repeatedly denied, and then the affair and its consequences take additional toll; her near obsession with celebrity deaths, and of course all the plants too define her in a sense. The younger Claudia meanwhile also has much to bear—while she is loved by her parents and aunt, and lacks nothing in terms of material comforts, she has to face her father’s reticence, and the oscillating relationship which she shares with her mother—at times close, with her mother sharing her feelings and past, at other’s her mother almost checking out of life and withdrawing into her shell so much that nothing her daughter does, whether an achievement or genuine danger causes any reaction.
The book navigates these characters and their relationships as also the consequences on each of the affair—little Claudia, especially impacted by the stories of death her mother is obsessed with leading to a fear of those she loves being snatched by the abyss that seems to be around them in many forms.
I thought this a nicely done book capturing a young girl living in a world more or less defined by the problems and complications of adult life, and at the same time trying to find connection to parents who are both difficult—one too reserved, the other at times so absent that she doesn’t care what is happening. And they both share their problems with little Claudia, she having to take on their pains and troubles along with her own. Eventually in the book though, it is the mother–daughter relationship which is more in focus, and while that was done well, I felt with the backstory of the father also explored, perhaps the father–daughter relationship too needed more attention.
Mis comentarios en video: Una novela conmovedora, desde la perspectiva de una niña que se enfrenta a los diferentes abismos que ofrece la realidad y la fantasía. Critica aspectos de maternidad-paternidad, así como el papel de la mujer en la sociedad, pero más allá de las críticas su objetivo es dejarnos perplejos frente a los abismos, que al igual que en las fotografías nos permite recordar o imaginar los sentimientos de vacío en el estómago que dejan los abismos vívidos vividos. Una obra entretenida con imágenes poéticas que invitan a dejarse llevar por la narración.
Narrated by eight year old Claudia and set in Cali, Colombia, there were parts of this novel that really drew me in particularly the darker sections that dealt with how women cope with depression or unfulfilled lives. Young Claudia doesn’t fully understand the adult world but has fears for her parents, her mother appears to suffer bouts of depression and is obsessed with the deaths of famous women from Princess Grace to Natalie Wood, and also the disappearance of an old friends mother and the recent death of a cousin, all things that weigh on the mind of a child. The ending seemed quite abrupt to me and overall it left me wanting more.
4.0 / 5.0 Me gustó la voz de Claudia, realmente me identifiqué con muchas de sus experiencias y situaciones que también yo viví en mi niñez, su curiosidad, sus ocurrencias, sus juegos, sus ganas de explorar los entornos y descubrir secretos, su amor incondicional, la manera en la que percibe su hogar, la relación de sus padres, los problemas de los adultos. Qué buen personaje y qué buena voz, logró transportarme a ese mundo que fue mi niñez. Sin embargo, me quedó faltando algún suceso que explotara y llevara la historia a su cúspide.