Å·±¦ÓéÀÖ

Oh Dios mío. He sufrido lo que no está escrito con este libro. Kiera Cass, en tu lápida tendrá que poner algo tipo "En 50 páginas meto más giros dramáticos que veinte novelas mexicanas juntas".

Madre de Dios. Lo de la montaña rusa fue a más. En serio. A lo largo de esta trilogía, aunque quisiera, me era imposible confiar en la certeza de algo. Los plot twists de esta mujer son impresionantes y me han mantenido en vilo hasta el final.

Lo de Aspen y Lucy. Dios. Lo sospechaba. Y he de decir que no podría haber mejor resolución para el triángulo amoroso que la que le ha dado la autora. Yo me planteé que acabaría matando a Aspen pero que hiciera que acabara con Lucy pero a la vez manteniendo su amistad con America... Es hermoso.

Maxon. Dios. Te amo. Pero te odio. O sea. Vale que seas inexperto en relaciones y que no hayas tenido mucha libertad para ver cómo era el amor, pero por favor, cada vez que America decía algo, tú le soltabas cosas que la herían más aún y eso era un círculo vicioso. Y America. Muchacha, relaja esa raja. Te faltaba una porra para ir dando hostias a diestro y siniestro. Pero para qué engañarnos. Esos tira y afloja eran de lo mejorcito. No sabía en qué punto estaba la relación ni cómo acabaría. Y esa incertidumbre me ha encantado.

El tema de los rebeldes. ¿Hola? Dios mío. Estaban por todas partes. ¡Incluso Gavril! La carta del padre de America fue hermosa. Y hay que ver. Fue él el que contó lo de los diarios de Illéa. Alucinante. Eso sí que no me lo esperaba.

Pero bueno. Hablemos de muertes. ¿La del padre de America? Me dejó boquiabierta. Me parecía que era el único que la comprendía, aunque finalmente me di cuenta de que estaba rodeada de gente que la conocía. ¿Los reyes? Ojalá no hubiera muerto la reina. El rey sí se lo merecía, por cabrón. ¿Celeste? Qué trauma leer su muerte. Tuve que releer el párrafo porque no me lo creía. ¡Incluso se cargó a Anne! Dios. Esta trilogía tiene complejo de matadero. Jajajaja.

De verdad. Estos libros son hermosos pero, en especial, este último. Las confesiones de amor en la habitación de America y luego todo lo que le dice Maxon cuando está herido o cuando están en su habitación... Ataque de feels. Era todo demasiado bonito. ¡Por no hablar de las cartas que escribió Maxon! Dios. De verdad. ¿Dónde firmo para participar en La Selección?

En definitiva, Kiera Cass ha creado un universo fantástico en el que no se ha dejado cabos sin atar y en el que me ha hecho enamorarme del amor, de los valores, de la fuerza interior que toda persona tiene. Gracias, Kiera. Tus libros me han enganchado y sorprendido hasta la última palabra. Pero, sobre todo, se han ganado mi corazón (y mis lágrimas).