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Después de casi 400 páginas, ya tengo una idea bastante clara de lo que hay que hacer para poder comunicarse con los veganos... vale, chiste malo.

Me daba mucha pereza ponerme con éste libro pensando que no me iba a encontrar nada nuevo al haber visto la peli y, mira por donde, me equivocaba. Al ver primero la película y leer luego el libro ya sabes un par de spoilers gordos; pero da igual porque es una novela entretenida, didáctica y profunda como Sagan, sorprendente en cuanto a su contenido, con una trama más que correcta (aunque con algún cabo suelto).
Los personajes son lo más flojo de la novela, aunque se supone que están basados en personas reales, les falta algo de chicha.

Lo que más me gustó fue la implicación internacional y la forma de enfrentarse a ese primer contacto de cada nación y de cada personaje. Y me sorprendieron mucho los brochazos feministas, a modo de una Presidenta estadounidense, y las vivencias y reivindicaciones de Ellie. You go, girl!

Por último: ¡Sorpresa de las sorpresas! Warner le metió un gol a Sagan y a todos nosotros con la película:
Ojalá que podáis leer la novela sin haberla visto porque es muy superior, el mensaje de fondo no tiene absolutamente NADA que ver. ¿Por qué se cargaron el final? No lo entiendo.

En resumen, me ha gustado mucho, le doy un notable y estuve por subirlo al sobresaliente porque en el 85 y sin saber de qué iba la historia, debía ser así. Pero tengo que ser honesta con mis circunstancias vitales y las lecturas anteriores... y haber visto la película las 1000 veces que la echaban por la tele, antes de que existiera el streaming... así que en 4 estrellitas se queda.