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-Querida golondrinita- dijo el Príncipe- me cuentas cosas maravillosas, pero más maravilloso que todo eso, es el sufrimiento de hombres y mujeres. No existe misterio más grande que el de la miseria.

Oscar Wilde nunca decepciona. Este pequeño relato fue hecho para su hijo, por lo que es considerado un libro para niñxs, lo que me recuerda mucho a El principito y a El niño, el topo, el zorro y el caballo, libros aparentemente infantiles, pero que en realidad son aptos para todas las edades, porque los mensajes que nos dejan son patentes y extraordinariamente acoplados a nuestro contexto. (Si quieres ver mi review de El niño, el topo, el zorro y el caballo les dejo el link: /review/show... ).

En este caso Wilde nos señala lo marcado de los estratos sociales, mostrando con crudeza la marginación y la injusticia social en que está sumido el pueblo trabajador. De igual forma la deliberante minoría privilegiada que omitía los suplicios de los más necesitados.

Realmente es un cuento triste, a pesar de tener un final melancólicamente feliz. Lo importante es reflexionar lo que Oscar Wilde nos quiso plasmar y actuar acorde a lo que el Príncipe Feliz hubiese querido.