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“- Usted no es lo que se dice discreto, lord Ralston -escupi贸 su nombre-. Para ser alguien que se preocupa tanto por la reputaci贸n de su hermana, deber铆a tener m谩s cuidado -le clav贸 el dedo enguantado en el hombro-. 隆He le铆do la nota! S茅 que va a encontrarse con su... su...
- 驴Mi...? -la presion贸.
- 隆Su... amante! -con cada s铆laba le clav贸 el dedo con m谩s fuerza.
脡l le cogi贸 el dedo al llegar al final de la palabra y se lo apart贸. sus ojos azules brillaron de una manera peligrosa.
- 驴Se atreve a reprenderme? 驴est谩 cuestionando mi comportamienro? 驴Qui茅n se cree que es?
- Soy la mujer que eligi贸 para guiar a su hermana en la sociedad. Y no le permitir茅 que arruine sus posibilidades por una noche de...
- 驴No me permitir谩 qu茅? 驴 No era usted la que coqueteaba desvergonzadamente con un dandi borracho ante los ojos de todo el que quisiera ver?”
― Sarah MacLean, Nine Rules to Break When Romancing a Rake

“[...] -As铆 que, como puede ver, que se encuentre aqu铆 esta noche es cosa del destino. Es usted la soluci贸n perfecta. Es decir, asumiendoque no tenga por costumbre visitar a caballeros en sus alcobas a altas horas de la noche.
[...]
- No, se帽or铆a. Es la primera vez.
Ralston sab铆a que era as铆 y tom贸 nota mental para descubrir m谩s tarde qu茅 era lo que hab铆a motivado esa visita nocturna.
- Y la 煤ltima, espero. Al menos hasta que Juliana haya sido presentada con 茅xito.
- A煤n no he accedido a su petici贸n.
- Pero lo har谩 -dijo en tono petulante-. Y, como pago, obtendr谩 su beso.
- Perdone que se lo diga -replic贸 ella con humor-, pero le da un valor muy elevadoa sus besos.”
― Sarah MacLean, Nine Rules to Break When Romancing a Rake