Al principio, deslumbrante. Espectacular. Hermoso. Buenísimo. Entonces, un poco de incomodidad... un poco de... ¿en serio parecería que los hunos y losAl principio, deslumbrante. Espectacular. Hermoso. Buenísimo. Entonces, un poco de incomodidad... un poco de... ¿en serio parecería que los hunos y los otros son exactamente igual de cabr*nes, igual de asesinos, igual de asquerosos; distintos solo en el contenido de sus ideas y en el hecho de que los hunos tienen más armas y, por tanto, cuando matan, matan más gente? No sé yo... esta equidistancia me resulta un poco amarga... ¿será que yo idealizo a los republicanos? ¿Será que no quiero pensar en las barbaridades que cometieron, aunque sé que hubo barbaridades, y que no fueron poquísimas, que en los pueblos que quedaron bajo el control de los republicanos hubo asesinatos, hubo (asumo) violaciones, hubo abusos; se humilló a los contrarios, se les robó; se les vejó; se les maltrató...? ¿Será eso y no que, de alguna manera, el autor está equiparando, poniendo a un lado a los hunos y al otro a los hotros, diciendo, he aquí que así fue la guerra civil: españoles contra españoles. Unos y otros, hunos y otros, igualmente enloquecidos e igualmente cegados por la ceniza, la sangre, la guerra misma? La decepción y el aburrimiento. Demasiada historia y demasiada fantasía, no sé cómo hace el autor para poner demasiado de ambas cosas sin que una matice la otra, a pesar de que es eso precisamente lo que intenta hacer y lo que logra hacer en un principio. Quizás es porque se pasa, se vuelve pesadísimo el recurso de la fantasía y también el recurso histórico. Demasiada pedagogía sobre situaciones de la guerra que nada tienen que ver con la historia de la familia de Odisto, aunque por los pelos meta a José o a Pablo o a ambos o a otro, para usarlo de excusa. En la boca te queda el sabor a pegamento quemado y el olor se te mete por la nariz y no te deja disfrutar como al principio, cuando no se le veían las costuras al libro. Al final, la última cuarta parte del libro la pasé leyendo en diagonal. Saltando capítulos que veía eran sobre estampas de tal o cual cosa que nada tenían que ver con la historia central, personajes que salían para "encarnar" la situación en tal ciudad, y que no saldrían ya más, porque eran no personajes y no personas, sino encarnaciones del sufrimiento en tal sitio; en tal batalla... pegados ahí. Una maqueta de una ciudad, o de un castillo, de un algo, cuyo autor no acaba de armar bien y termina pegando trozos de cualquier cosa porque no quiere tirar nada a la basura, quiere usar todos los recursos que encontró, todos los trozos de madera que le costó acumular en archivos y bases de documentos y entrevistas y lecturas. No quiere tirar nada, todo irá, todo el país tiene que salir representado, aunque tenga que poner la pistola de pegamento a tope y la maqueta parezca un pastiche y ya no se asemeje a una novela. Leyendo en diagonal he llegado al final y he dicho, uf, al fin acabo la novela esta. Qué larga se me ha hecho. Y no le doy dos estrellas porque el principio es verdaderamente espectacular. ...more
3.5 really 4 sometimes, when i think of it in one way, but 3 other times. i loved reading this book, so 4 i thought the big secret, the big reveal, was, 3.5 really 4 sometimes, when i think of it in one way, but 3 other times. i loved reading this book, so 4 i thought the big secret, the big reveal, was, anticlimatic. so that's a 3. and it's clearly my incapacity to fully grasp how it was. also, to fully feel what the mom felt. the depth of love and loss and stuff. i guess i am not at my most empathetic this week. or maybe i didn't receive enough something to feel it. i can empathize with characters in Anthony Trollope's extremely romantic and christian novels, so what is going on here... it's a lovely read, really. a painful life, a painful culture, a painful history, pain in the families, in the streets, in the schools, in friendships, everything shiny with a patina of pain. ...more
este libro me gustó muchísimo. al principio, no tanto. me costó un poco engancharme. pero luego, cuando entendí el planteamiento, el ejercicio de preseste libro me gustó muchísimo. al principio, no tanto. me costó un poco engancharme. pero luego, cuando entendí el planteamiento, el ejercicio de presentar todas las piezas de memorias, de narrativas, de cosas que se dicen, sin hilar, porque así se dan, porque en la realidad los cuentos y las historias que se cuentan en una familia, en un pueblo, en un barrio, en un edificio, en una comunidad, no se hilan, no las hila nadie, quien hace de escucha las va internalizando, they accrue, but they don't become threaded... cosa difícil, escribir sin hilar... pero muy útil y relevante en este contexto, este tema, y este formato de memoria.
tengo que leer el libro de los trenes, y el del rey de inglaterra, y el de la soledad, y el del pueblo donde paró el tiempo. quizás entonces entienda tengo que leer el libro de los trenes, y el del rey de inglaterra, y el de la soledad, y el del pueblo donde paró el tiempo. quizás entonces entienda mejor este libro.
este libro a mí me recordó un poco a Platero y yo, otro libro que leí así a lo loco (sin conocer nada más de su autor, sin contexto histórico, sin haber visto un burrito en la vida, sin saber nada de España) y que me dejó, igual que éste, con la certeza de que había cosas a las que yo no tenía acceso. yo, por mi cultura, mi edad, mi ignorancia sobre el contexto en el que se escribieron estos libros que no son novelas tanto como antologías prosopoéticas con estampas que suman y se suman en un relato...
el relato de este libro es muy gracioso, pero lleno de cosas terribles. raro, muy raro. pero hermosamente contado. hermosamente escrito. literatura bellísima... pero a mí me ha dejado sin comprender demasiado... ...more
I am surprised at the 3.6+ rating that this book has... This was a beautiful read, absolutely beautiful... words and sentences, words, language, literI am surprised at the 3.6+ rating that this book has... This was a beautiful read, absolutely beautiful... words and sentences, words, language, literature, words, images, words... Lydia Davis reminded me of Kay Boyle and Jean Rhys, writers that I have only read recently, and that write magically. Not magical realism, not about magic, but as if they were magicians with words, magicians with language, magicians with human emotions, with love, with desire, with human pair-bonding... with pain and neglect... intense and subtle and beautiful...
I had absolutely no connection with the narrator. None. I would never, ever, do what she did at the end of an affair. I have had "stories" end, loves end, and I have never ever done what she did... not even felt what she did. And therein lies the magic: it is rare to have a reader delight and enjoy and suffer along with a first-person narrator whose innermost thoughts and feelings are revealed in such bone-baring transparency, with such brutal honesty and openness, when one simply cannot even imagine what those feelings feel like... the most painful end, for me, led me to ask my friends and family NEVER to mention his name again. Simply do not mention this man's name to me. I cried all night, and said, I will cry now, I will cry it all out NOW, but I will never cry for him again, NEVER. And I did not. This man was the greatest passion in my life, a soul mate, the love that fills those songs and movies and art, you know which. And I tore him out from my heart and my mind and my life. My first love, which was all-consuming for months and months, for years--we were together all through college--was also terribly painful to end. I still cry over him, he was so tender and devoted. Nobody has ever been as devoted as he was. Well, that is not true, but the most devoted lover I had, I did not love. I cared for him and longed for him and still care for him, but I did not love him, that is the truth... and he is still waiting, 30 years later, he still says, if you ever think that we can be together, tel me.
But never, never, never, would I do what this woman did. Until I read this book, I would have called what she did self-humilliation. Lowering yoursel. Groveling. I hated Alanis Morissette's first hit song, You oughta know, because it celebrated this, this... ugh. But after reading this book, I feel differently about these displays of need and vulnerability, these displays of weakness and abandonment, these calls for love. I would never, never, do them, I could not, I am too proud to show weakness like that, I would rather die than reveal to somebody just how much I want their love... but my personality is not better than these women's, these people. I would rather die than ask my own child to love me if a situation came up in which I had to ask. My pride is not a good thing. It's just a thing.
So a book that is beautiful and that has made me change my perception about a basic human emotion and behavior that I have never understood before, and that I still cannot fully comprehend? I tink one reads one of these books every couple of years... and this year, I have read two... amazing... ...more
Por alguna razón, este libro y yo no nos hallamos... No me enganchó, no lo pillé, no tuvimos un encuentro, ese encuentro que todo lector y todo libro Por alguna razón, este libro y yo no nos hallamos... No me enganchó, no lo pillé, no tuvimos un encuentro, ese encuentro que todo lector y todo libro realizan, usualmente y con suerte al principio de la lectura, que es el que permite que el mundo del lector se pueble con sus personajes, se emocione con sus penas, se ría con su comicidad, se abra a las ideas del autor... no siempre sucede, ese encuentro. A veces parece que leemos a través de una ventana o de un cristal: es un libro, lo tengo en mis manos, lo leo. Leo sus palabras, entiendo las oraciones, puedo visualizar sus paisajes--en este caso, la tienda por departamentos, los ancianos, el clan de niños y niñas, los policías, las explosiones, al perro, la habitación de Benjamin--pero no estoy en ellos, y lo que es más significativo, no quiero estarlo. No quiero abandonar mi propia habitación, mi propia piel, que es un límite tan empequeñecedor, que me hace ocupar poco más de un metro cuadrado de espacio en el mundo, y eso solo si estiro los brazos lo más que puedo... Usualmente los libros nos hacen enormes porque nos deshacen: los amarres que nos sujetan, necesariamente, a nuestra vida material, nuestra vida diaria, se sueltan; el cuerpo que somos y que habitamos, que nos coloca, necesariamente, en nuestra vida material, en nuestro lugar en el mundo, para que, como especie gregaria que somos, estemos conectados con madres, padres, hermanos, hermanas, primas, primos, amigos, amigas, vecinos, choferes, dependientes, enfermeros, doctoras, policías, caseros, conserjes, el gato, pero también la tortilla, el arroz con habichuelas, el helado de vainilla con nueces de macadamia, la canción del Gallo Negro, el olor a Álvarez Gómez del abuelo, la yerba bajo los pies, el agua tibia de la ducha... Los libros, con la magia de las palabras y de los cuentos, nos desdibujan hasta que no hay olor, ni piel, ni vecino, ni hija, ni gato, ni agua, ni canción, no las reales, las materiales, las de átomos y energía, y nos vuelven a dibujar, esta vez en otro universo, con sus olores, su tacto, sus sonidos, sus colores y sus gentes.
Pero con este libro, no me pasó esto. Desde que empecé hasta que terminé, estuve mirando desde dentro de mi propia piel, con mis ojos firmemente puestos en mi propia cabeza y viendo las palabras y viendo a Benjamin y a sus hermanos y a todo París desfilando ante mí y haciendo cosas. Cosas. Diciendo cosas. Nada iba conmigo. Todos me parecían un poco odiosos, un poco indeseables. Me los imaginaba apestando, a todos. Quizás es mi prejuicio anti-francés--que es un pueblo que tanto alaba la sensualidad, que piensa que ducharse demasiado y usar jabón y desodorante quita el olor natural, a sudor y sexo y queso brie de ayer, que todo francés o francesa que se precie debe ir emanando por el mundo. Los prejuicios son así, son capaces de marcar de manera negativa una experiencia que bien podría haber sido hermosa o hilarante, divertida o transformadora. Quizás todo se reduce a eso, a que cuando algo empieza a sentirse demasiado francés, mi piel se hace el doble de gruesa, me surge otra capa de piel, esta con los poros en sitios distintos, para que no se cuele nada dentro, no sea que lo francés-muy-francés acabe por meterese en mi mundo interior. Ahí donde están las mujeres y hombres de Trollope y de Jane Austen, de la literatura española y la latinoamericana, de personajes infantiles puertorriqueños, los colores de Abdulrazak Gurnah, la familia india-caribeña de Naipaul, las palabras luminosas de Virginia Woolf y Kay Boyle, el pueblo entero de Faulkner... uf, no, quita, quita.
Quizás esa es la razón de mi falta de encuentro con este libro, con este autor, con estos personajes... no lo sé. Le puedo decir a Malaussene, "no eres tú, soy yo". Pero al final, da igual: este libro y yo no nos encontramos. ...more
Este libro tiene cosas muy interesantes, tantas como el anterior. Y está mejor escrito. Aunque es un poco "más de lo mismo", es un más de un mismo queEste libro tiene cosas muy interesantes, tantas como el anterior. Y está mejor escrito. Aunque es un poco "más de lo mismo", es un más de un mismo que es entretenido y que está muy bien. Pero si siguiese la serie, yo ya no la seguiré leyendo. El género de la novela negra me aburre muchísimo, incluso cuando hay cosas tan fascinantes como las cuestiones históricas y eclesiásticas que trata este autor....more
i read this on my 8 hour flight home. i skimmed parts. that's how blah i thought it was. such a guy novel. so pedagogical. uninspired. uninspiring. soi read this on my 8 hour flight home. i skimmed parts. that's how blah i thought it was. such a guy novel. so pedagogical. uninspired. uninspiring. so dramatic. so exaggerated--life is so incredibly impossible for the poor, that it makes no sense there are any living characters who are not wealthy. a total disappointment....more
Este es un libro de tres estrellas que disfruté como si fuera de cuatro. Era justo lo que debía leer en el momento preciso.
No me gusta el género de lEste es un libro de tres estrellas que disfruté como si fuera de cuatro. Era justo lo que debía leer en el momento preciso.
No me gusta el género de la novela negra; tampoco el detectivesco, en general, aunque lo aguanto más. No me encanta la ficción histórica tampoco. PERO este libro conjuga ficción e historia muy convincentemente. Quizás está absolutamente plagado de inexactitudes brutales acerca de cómo era la vida diaria en un monasterio de la época descrita, pero a mí me ha convencido bastante. Aunque estoy segura de que había muuuuuchos más creyentes, y mucha más fe, de la que el autor parece imaginar y su narrador plasmar. El escepticismo es un rasgo de personalidad poco común, y, hasta hace poco tiempo, poco valorado. Tampoco imagino que había tanta gente dispuesta a aceptar la homosexualidad con la facilidad con la que parece aceptarse en este libro, entre otras cosas...
Pero es una lectura amena y divertida, muy divertida. Tanto así, que hoy mismo empeazaré a leer la segunda entrega de la saga. ...more
what th...?! okay, i read this book and i liked it, and i was really confused, and i learned stuff, but i'm still like, what was this?! i might, perhapwhat th...?! okay, i read this book and i liked it, and i was really confused, and i learned stuff, but i'm still like, what was this?! i might, perhaps, need to read it again, but i have too many things to read to reread a book about three cows. even though it is, quite possibly, the best book ever written about three cows (and a calf). ...more
lo terminé en 3 días porque engancha. pero también porque me saltaba párrafos enteros, páginas enteras... y al final, los personajes se ponen a hacer lo terminé en 3 días porque engancha. pero también porque me saltaba párrafos enteros, páginas enteras... y al final, los personajes se ponen a hacer demasiadas estupideces. no entiendo cómo le han dado un premio tan importante... pero me ha entretenido mucho....more
the mother... the father... Olivia and Mildred... why is Mildred growing facial down as she loses her mind? it seems clear that there is an endocrine the mother... the father... Olivia and Mildred... why is Mildred growing facial down as she loses her mind? it seems clear that there is an endocrine issue going on. among others. the father has some food on his mustache. the mother rubs her hands on her apron. Olivia is annoyed.
i was between fictions. i mean, i am reading a non-fiction book for my other book club (my first, and proper, book club, would never make us read non-fiction!), and i am also reading a bunch of books for my research right now, and i finished the novel for my first book club four days ago, and i read this long short story and was very, very glad to have done so.
i keep forgetting how awesome kay boyle is. and i'm not the only one. it is hard to find her books. i wish there's a revival, like there was for shirley jackson. these women! they're SO AWESOME, and, yet, so forgotten. these are the canon, people. seriously. faulkner, shirley jackson, kay boyle, edith wharton, john steinbeck, mark twain, edgar allan poe, ernest hemingway, flannery o'connor, f. scott fitzgerald, james baldwin, kate chopin, pearl s. buck, elizabeth strout, harper lee. ...more